NEGACIÓN A LA VERDAD DEL CORAZÓN
Vileza es ese vil sentimiento que me extiendes
con el alma, para que cruce a la otra orilla descalza y sin zamarra. No lo
entiendes – te respondo desde el otro lado – jamás te haría daño. Imposible –
te grito irritado – sólo quieres que me hunda en el barro. Tendrás que hacerlo
para identificar todos tus apegos. No hay más remedio. No niegues tu sabiduría,
pues tu negación es tu infierno. Aquí te espero. Tengo todo el tiempo. Voy y
tomo asiento.