Mensaje nº34

CERRANDO HERIDAS


Llené mi cuerpo de las heridas de los falsos mensajes, que traía consigo el viento. Me ungí de necesidades y estúpidos deseos. Esos que Tú me quitaste, para que mis heridas sanasen a tiempo. Salí de mi infierno, el que sólo Tú pudiste convertir en un Paraíso plagado de bellos sueños. Sentí tu mano, posada en mi cabello. Sentí tu caricia y fue ahí donde derretí todo lo que de mí, te negaba a Ti. Gracias.